Nos encontramos en tiempos de desafíos económicos. El panorama financiero mundial está en un punto complicado y la mejor manera de hacer frente es mantener finanzas personales saludables, que nos permitan hacer frente al vivir diario y nos proporcionen seguridad ante imprevistos. Sin embargo, por la misma complejidad de la situación, muchas veces nos vemos en circunstancias que dificultan el correcto flujo de nuestra economía. En esta entrada de blog queremos darte los mejores consejos para reparar, cuidar y mejorar tus finanzas personales, ¡sigue leyendo!

Reparando tus finanzas personales

Identifica tus gastos e ingresos

El primer paso para mejorar tus finanzas es tener bien clara la totalidad de tus ingresos y tus gastos. En el momento en que nuestros gastos son mayores que nuestros ingresos, estaremos en un problema que muy posiblemente resulte en deudas que mermen aún más nuestra economía. 

Te recomendamos anotar tus ingresos, gastos y hacer una comparación que te permita visualizar claramente cuáles son tus fugas de capital, tus áreas de oportunidad, así como distinguir tus gastos importantes de los superfluos.

Te dejamos este enlace con recomendaciones sobre aplicaciones que pueden serte de ayuda para mantener un registro de tus gastos

 

Elimina tus deudas

Es muy probable que si has estado sorteando dificultades de dinero, sea por estar dentro de un círculo de deudas. Una vez que hayas identificado bien tus gastos, y antes de poder progresar con otros puntos, es muy importante que liquides tus deudas.

Las deudas representan una fuga de capital que muchas veces resulta en un círculo vicioso: Contraigo una deuda para solventar un gasto superfluo, después cubro la deuda pero pierdo capital necesario, así que me endeudo nuevamente, ¿te suena familiar?

Sabemos que pretender pagar tus deudas es una labor más fácil de nombrar que de llevarse a cabo, pero con la planeación correcta es posible. La manera más sencilla es empezar a dividir tus ingresos según la regla 50/20/30 y darle prioridad a tus acreedores.

Regla 50/20/30

La regla 50/30/20 consiste en dividir tus ingresos mensuales en distintas cantidades y darle un destino diferente a cada una:

• Tus necesidades básicas (comida, agua, gastos inamovibles del vivir) deben quedar cubiertas con un máximo del 50% de tus ingresos totales.
• Un 30 % puedes destinarlo a gastos personales, recreación, etc.
• El último 20 % debe ser única y exclusivamente para ahorrarse y / o invertirse. 

Nosotros te recomendamos que, si hay deudas entorpeciendo tus finanzas personales, dediques el 30 % de tus ingresos, ese 30 % dedicado a gastos personales, para cubrir tus deudas hasta que queden completamente saldadas. Una vez que logres este objetivo, podrás empezar a tener otras consideraciones.

 

Recorta tus gastos

Ya has identificado bien tus gastos e ingresos, has dividido estos últimos para distribuirlos entre todas tus necesidades y has resuelto satisfactoriamente tus deudas. El siguiente paso es reducir tus gastos personales.

Hay gastos superficiales, principalmente sobre cuestiones de entretenimiento y placer. Todas las personas necesitan esparcimiento y cumplir un capricho de vez en vez, pero es importante no dejar que el hedonismo controle nuestros gastos. 

Las compras impulsivas o emocionales, salir a comer o pedir comida, el tabaco, alcohol o comida chatarra son algunos de los principales gastos de los que se puede prescindir. Identifica bien si tienes alguna oportunidad de recortar tus salidas de capital, aunque sea un poco.

El dinero que ahorres de esos gastos, aunque sea mínimo, puede juntarse al 20 % que destinarás a ahorrar.

Establece tus objetivos

Ya que tu flujo de ingresos esté liberado, te recomendamos ampliamente establecer objetivos realistas de ahorro en un plazo determinado.

Ahorrar puede ser tedioso e incluso complicado, pero establecer objetivos claros que puedas visualizar ayuda ampliamente al propósito. ¿Quieres ahorrar para el enganche de una propiedad? ¿Un viaje? ¿Para formar un fondo de ahorro contra contingencias? ¿En cuánto tiempo planeas lograrlo?

Tener todas estas cuestiones claras es primordial para seguir avanzando con la construcción de tus finanzas personales. Te dejamos este enlace con recomendaciones de apps para ahorrar dinero.

 

Ahorra, crece e invierte

El cuidar y conservar tu capital únicamente no es suficiente: es necesario hacerlo crecer. Quizá no dispongas del tiempo para generar ingresos adicionales a los de tu fuente principal, pero puedes establecer el objetivo de ahorrar para invertir, y así empezar a mejorar tus ingresos de manera pasiva. 

El aumentar y diversificar tus ingresos es esencial para tener finanzas personales sanas, estar preparado para contingencias y para asegurar un futuro tranquilo durante tu retiro para ti y tu gente cercana.

Es posible, por ejemplo, que establezcas un objetivo de ahorro para adquirir el capital suficiente para un terreno, y ese terreno utilizarlo en un negocio pequeño que no requiera mucha mayor inversión, como por ejemplo, un estacionamiento. Después, dedicar íntegros los ingresos obtenidos por ese medio al ahorro u otra inversión y empezar así un búcle económico positivo.

Estos son los consejos que pensamos más prudentes para reparar y mejorar tus finanzas personales. Sabemos también que es el tipo de cosa que es más fácil decir que hacer, pero estamos completamente seguros de que con determinación, tiempo y paciencia, es posible mejorar tus finanzas y por lo tanto, mejorar tu vida.

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